Y me dispongo a armar nuevamente el bolso, pero esta vez es uno imaginario.
Y es que cuando te acostumbra a meter en él solo lo que sabes que vas a necesitar te das cuenta que te faltan muchas cosas. Cada tanto te dan ganas de llenarlo e irte. Solo por que si, no por que tenes que hacer sino porque lo necesitas. Necesitas alejarte de todo y ver algo nuevo. Porque a veces extrañar es necesario y útil... antes de que todo se termine.
No hay comentarios:
Publicar un comentario