Hoy soy más egoísta que nunca. Hoy no solo me voy a regocijar en mi
propio sufrimiento. No, eso ya no me basta.
Hoy lo comparto y te hago
cómplice, lector.

lunes, 4 de enero de 2010

EL DÍA QUE YO ME TIRE ABAJO DE UN TREN

Cada vez que estoy en la estación, esperando el tren, y avisan por altavoz que se ha retrasado pienso: ¿No hay otra forma de matarse que tirándose abajo de un tren?
Esa gente, ¿no se da cuenta que hay mas de una forma de matarse sin joder a los demás?
Parece que no, porque generalmente cuando llego a casa después de haber viajado para la mierda, prendo la tele y (por alguna extraña razón que nunca voy a entender está el noticiero a aire) veo que la razón de que halla tenido que viajar cual vaca al matadero es que un boludo/a se tiró abajo del tren ya sea por propia voluntad o propia boludes (quiero creer que todos sabemos que no se puede viajar colgado de las puertas del tren, que no se saca la cabeza o las manos por la ventanilla... y demás consejos que, realmente, son útiles).
Se que todos tenemos un mal día por lo menos una vez por semana y que hay muchas (demasiadas) presiones sociales que nos hacen creer que el mundo gira para un lado y nosotros ni giramos... pero creanmen, el suicidio es sólo divertido cuando no jodemos a los demas.

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