Entras al Fb, como todos los días. Revisas notificaciones, muro, perfil. Lo mismo de todos los días. Pero ¡cuidado!, no es un día como todos, hoy es el día que al hijo de puta de tu ex se le ocurre agregarte al Fb.
Por si los mails no habían sido suficiente, por si el messenger no había logrado borrar todo tipo de esperanza para con la población masculina, por si el simple hecho de estar contestandoles no te hizo sentir la mina mas patética del mundo, ¡EL TENIA QUE AGREGARTE AL FB!
¡Basta, che! No se que te propones pero conmigo no cuentes.
¿No entendes que no soy una mas? ¿No entendes que yo si te conozco? ¡Conozco todas tus tretas y mentiras!
Y sin embargo... la tarada cae y aprieta aceptar... para chusmearle las fotos, o el muro, el perfil... para darte cuenta que es el mismo hijo de re mil puta y no un boludo con el mismo nombre.
Al final, si es un boludo con el mismo nombre... pero con dos cuentas de Fb. En una esta -SIGUE- casado con la pajueranita de pueblo y en el otro... te agrego a vos.
... al final, él también te conocía.
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